lunes, 2 de noviembre de 2015

Decretando cosas y aboliendo incoherencias

Yo siempre ando al revés. Por ejemplo: las cosas que planifico y ordeno, puede que me salgan bien, pero las que me salen mejor, esas que me producen fuegos artificiales interiores y ganas de abrazar a todo el mundo (mundo=gente que quiero, porque ¡yiak! no soy abrazadora) y de caminar saltando, como lo hacía cuando tenía 5 años, esas todas me salen por casualidad y/o atarantamiento. Otro ejemplo: cuando tengo el pelo largo y me dan ganas de cortármelo y pienso en lo práctico y liviano que debe ser y en lo libre que se debe sentir una así y en la media hora extra que tendría todos los días. En cambio, cuando me lo corto, quiero tenerlo super largo y juro no volver a cortarlo nunca más y quiero aprender a hacerme trenzas de esas que se ven facilísimas en los videos, pero cuando lo intentas, te das cuenta de que necesitas un Phd. O en mi caso, nacer de nuevo.





Con las fotos es lo mismo. La mayoría de mis contactos de Flickr e IG están en el otro hemisferio y publican fotos totalmente opuestas a las mías. ¿Y qué me produce eso a mí? Exacto, ganas de cambiarme de país. Cuando más me afecta este fenómeno, es cuando llega la primavera, osea... justo ahora, porque mi estación favorita es el otoño, siempre lo ha sido y siempre lo será. Parece un complot en mi contra entrar a IG y ver cientos de fotos de la punta de unos zapatos sobre una alfombra de hojas multicolor o gente vestida con ropa gruesa y esponjosa, la luz cálida que se cuela entre los árboles de miles de colores, los chocolates calientes y humeantes, las recetas de sopas..... ¿cómo es posible que autoboicotee mi propia primavera añorando estaciones ajenas? ¿Se puede ser más bruta? Estoy pensando a quién culpar por ésto, pero aún no se me ocurre nadie. 




Lo peor de todo, es que me di cuenta de que realmente me quedo pegada en un mood que no corresponde al paralelo 33 sur, que es donde me tocó aterrizar en esta vida, y se me quitan las ganas de hacer fotos (¡horror!). Cuando acá caen patos asados, sólo pienso en fotos de lluvia, días grises o nieve... y cuando ya no podemos más del frío y la neblina, me bajan unas ganas locas de fotos en la playa, de agua, de sol y arena. Incluso, he escrito posts poniendo fotos de la estación contraria a la que estoy... es decir... ¡kukuk - kukuk! 



Nótese que estas fotos de lluvia son de verano... pero así es el sur de Chile...

Pensé en ésto la semana pasada y tomé la decisión de empezar a abolir hábitos incoherentes de mi vida, uno por uno. No es que sean tantos tampoco (abstenerse de las bromas por Whatsapp, gracias), pero éste encabeza la lista. En el segundo lugar del ranking de las incoherencias quedaría el hecho de hacer siempre una lista de compras en una pizarrita a medida que se van acabando las cosas, y nunca llevar la lista conmigo al super y, por consiguiente, más de una vez quedarnos sin papel higiénico (dándonos cuenta en el peor momento), pero con 20 latas de atún en la despensa. Pero esa situación no es tan terrible como quedarme sin ganas de fotear, porque tenemos reemplazantes bastante buenos para el papel higiénico, como servilletas (de papel, obvio... ¡por favor!) y otros..... ¡sí, hay otros!. 



En fin, el tema es que en un intento de hacer un decreto de esos que se cumplen sí o sí, les dije a las niñas, (poniendo mi cara solemne y mi voz de mando): "Niñas, esta primavera la vamos a disfrutar más que nunca". Eso fue la semana pasada y parece que no lo dije lo suficientemente fuerte o el universo se hizo el sordo, porque tenía planificado un fin de semana de exterior, pero me tuve que conformar con el encierro y cuidar a mi cachorra menor que casi se da vuelta de la tos como quien da vuelta un calcetín.




Bueno, ya me puse en modo primavera o, mejor dicho, en modo "feliz con mi primavera y no deseo otoños ajenos", y como ya estamos tan cerquita del verano y el universo decidió hacer trizas mis planes primaverales con días grises, anuncio de lluvia y un virus, pongo acá unas fotos de verano del 2014 que aún tenía acumuladas y habré de conformarme con las cuatro fotos de flores que subí a IG y que puse en el post anterior.




Espero que todo el hemisferio sur esté teniendo una linda primavera, en especial mi amiga Sandra, que vive en Australia y que en estos días no sé por qué la he extrañado más que lo normal, que ya es harto. A ella le dedico estas fotos de mi IG, que sé que a ella le fascinan, de hecho, a las dos nos fascinan, porque nos transportan a un momento muy pero muy feliz de nuestra infancia... Es tan injusto que estés tan lejos... quiero patalear y reclamar por eso y arreglarlo de alguna forma  :(




Decreto de la semana: Encontrar amigos fotógrafos en el paralelo 33° S meridiano 70° O. No puedo seguir tan sola en ésto que tanto me gusta hacer en la vida. Ah! Y que sea cuerdo por favor, no como el último que conocí, que hace que mis menjunjes mentales sean de prekinder en comparación con su mentalidad retorcida nivel master y ego del tamaño de Saturno, o de Júpiter que creo que es más grande... no sé cuál es más grande, pero el que sea, ese es.


6 comentarios:

  1. Como se diría por esta parte remota del hemisferio norte (trocito de Andalucía): Flavia, "tienes musho aje" (traducción: tienes mucho ángel). Newsletter recibida a la perfección. Risas echadas con tu post. Suspiros de admiración por tus fotos. Cuánta vida! Cuánto color!
    Felicidades y que disfrutes de tu preciosa primavera :)

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    1. ¡¡¡Gracias, Ignatia!!! Feliz de que pases por aquí. ¡Besos desde el otro hemisferio!

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  2. Hola Flavia. Me topé contigo en el blog de Jackie y decidí venir a verte, porque tu comentario me llamó la atención. Como dice Ignatia, tienes mucho ángel y escribes muy bonito.
    Yo nací en Venezuela, y hace 12 años que decidí vivir en España. Imagínate el cambio, de no tener estaciones a tener cuatro. Tengo mis favoritas (otoño y primavera), pero creo que al final las 4 me gustan por alguna razón y he decidido disfrutar de cada una, al fin y al cabo antes no tenía ninguna.
    Veo tus fotos y añoro la primavera Chilena, pero también su otoño y su invierno. Si, viví en Santiago un poco más de medio año, desde Abril hasta Octubre y solo tengo recuerdos maravillosos de tu tierra (desde La Serena, hasta Valdivia). Algún día volveré.

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    1. Hola Priscila, gracias por venir! Yo tengo una amiga en Venezuela, increíble, pero somos super amigas, a pesar de que nunca nos hemos visto. Nos conocimos en la escuela de Jackie. Ella siempre me cuenta de que no tienen estaciones... es que lo encuentro surrealista! No sé si podría acostumbrarme a eso. Me imagino lo que debe ser cambiar de eso a tener 4 estaciones super marcadas y extremas... jajaja a veces nos da mucha risa, porque whatsapeamos y ella me dice: "me estoy congelando, hay 18°"... y yo le digo "yo estoy muerta de calor, hay 18°" :)
      Bienvenida a mi blog, espero verte por acá de nuevo y me vienes a visitar cuando vengas a Santiago. Besitos desde 33°S70°O!

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  3. me encantas!!!!!!! Disfruta la primavera por mi, que este año yo estoy disfrutando el otoño por ti!!! Estamos teniendo un otoño precioso, con un sol y una luz como no recordaba nunca!!!!! Lo viviré de pleno pensado en ti guapa!!!
    Un besazo.
    Lali.

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    1. Estoy poniendo todo de mi parte para reencantarme con el verano... es que acá en Santiago es super caluroso, al menos para esta pobre sureña desadaptada...

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